Como sabéis, cada año, a principio del curso escolar, se da la mayor batalla en el mercado español: Pro vs Fifa. Es una batalla que no siempre tiene el mismo ganador. Empezó arrasando Fifa, a base de esfuerzo Pro Evolution Soccer no sólo consiguió compensar esa diferencia, sino que convirtió a España en uno de sus bastiones, y en los últimos tiempos se aprecia una recuperación del mercado por parte de Fifa.

Aunque aún no han aparecido ninguno de los dos juegos en el mercado, gracias a nuestra asistencia a la GamesCom, hemos podido acceder a las últimas versiones de ambos juegos. Lo primero que hay que comentar antes de entrar en el juego en si (y recordemos, no es una versión final, pero si deja ver muy claramente por donde van los tiros) es la diferencia de precio, al menos por lo que tenemos anunciado a día de hoy: Pro Evolution Soccer 2012 costará 30 euros más barato (PVP recomendado a no ser que hagan cambios de última hora) que Fifa 12. A pesar de ser 2 juegos que se amortizan con gran facilidad, en los tiempos en los que estamos, esa diferencia de precio se debe notar… y mucho.

Entrando en el juego en si, Pro Evolution Soccer también ha recortado la diferencia a nivel de entorno futbolístico que tenía Fifa. Por fin, toda la liga LFP está representada de manera fidedigna, y están haciendo un gran esfuerzo por dejar las plantillas actualizadas, y que se actualicen de manera regular. Algo que Fifa lleva haciendo de una manera muy destacable desde la edición 2009, donde añadieron la posibilidad de actualizarlas vía internet (al principio gratis, y luego de pago).

Entrando en el juego en si, observamos diferentes movimientos. Fifa alcanzó la cúspide de su modelo actual en el año 2010. En 2011 experimentaron con una curiosa maniobra, que a nivel de ventas les salió bien, pero que a nivel de jugabilidad criticaron los expertos, en la que creaba de manera artificial la posibilidad de errores en la creación de «juego«, salvo que usásemos un determinado tipo de rol durante la elaboración. De esta manera, se intentaba acercar a un modelo más realista, pero a la vez era más frustante, por no saber exactamente cuando te podía fallar el pase. En cambio, este año han rehecho la mecánica, especialmente a nivel de defensa. Si bien durante la creación el sistema es muy parecido (con la añadidura de un botón para crear jugadas espectaculares), en defensa el sistema substituye el botón de entrada – presión por dos botones, uno para presionar al jugador, y otro para «meter la pierna» (además de otro para entrada fuerte, como siempre, y de habilitar otro para la ayuda de un compañero). De esta manera, es más difícil defender, y requiere de cierta adaptación hasta que se nos pase el síndrome «jugador pulpo», por tener que apretar hasta 5 botones para realizar una acción defensiva (dirección, correr, presionar, meter la pierna y la ayuda del compañero).

Pro Evolution Soccer, este año, se ha centrado en mejorar el producto del año pasado, que ya experimentó ciertos cambios en la mecánica de juego, en el aspecto gráfico y en la interfaz. Así, a diferencia de Fifa, el año pasado los pases siempre tenían su riesgo, pero dependía de la habilidad del usuario más que de una probabilidad. Este año no sólo es más fluido, sino que la inteligencia artificial lee mejor los partidos, y crea más posibilidades para que el jugador sea quien, con mayor o menor habilidad, elija y realice las jugadas. Pero por si la inteligencia artificial no es suficiente, se otorga al usuario la posibilidad de mover a otros jugadores en la misma jugada. Algo que ya se puede realizar en las versiones de Wii, esta vez con el stick derecho. También requiere de cierta adaptación, y puede provocar el síndrome mencionado anteriormente, pero a diferencia de Fifa es opcional y enriquecedor, y se puede usar en las jugadas a balón parado, lo que les da un abanico de opciones que no tenían anteriormente.

A nivel técnico, es similar. Es cierto que Pro Evolution Soccer ha mejorado las animaciones, pero siguen siendo algo robóticas fuera de las repeticiones (donde lucen sorprendentemente bien). Sus jugadores están más estilizados y en estático tienen un aspecto fantástico. La interfaz es excelente, tanto en el juego como fuera de él. Fifa se ha centrado en mejorar las colisiones, con resultados muy graciosos en las versiones que hemos probado (se pueden provocar amontonamientos de jugadores por las secuencias de colisiones realizadas), conservando en el resto de ámbitos el excelente resultado anterior.

En resumidas cuentas, y a falta de que empiece la Liga, lo que parece muy claro es que este año los aficionados al fútbol nos vamos a poder divertir. Los dos juegos ofrecen modelos distintos y complementarios de sistemas de juego, pero a la vez dan entretenimiento suficiente para todo un año. Uno es más barato que otro, pero eso ya va por gustos. Desde aquí, lo que tenemos son muchas ganas en que llegue el comienzo de la liga virtual.